Egipto dedica gran parte de las ayudas al desarrollo a reducir su dependencia hídrica del río Nilo
“Para que nuestros ríos lleguen sanos al mar“
Infórmese
Egipto es un país desértico que depende principalmente del río Nilo para el abastecimiento de agua. El 90% de la población egipcia vive a lo largo del valle del Nilo compartiendo este recurso natural con otros 8 países africanos. El resto de los recursos hídricos en Egipto representan el 5% del abastecimiento hídrico del país, por lo que el Nilo es el pilar que sustenta el sector industrial y agrícola de Egipto y la principal fuente de agua potable de uso doméstico.
Sin embargo, el país sólo puede disponer de alrededor de 55.500 millones de metros cúbicos anuales según la Convención del Nilo de 1959, acordada con Sudán. La cuota de agua de Egipto se podría ver amenazada por el nuevo proyecto de la Presa del Renacimiento de Etiopía, que pondría en peligro la seguridad alimenticia en el país, ya que supone la reducción de las cantidades de agua del Nilo a la mitad. Se trata de una represa en construcción en la región de Benishangul-Gumuz sobre el Nilo azul. Las aguas que provienen del Nilo Azul de Etiopía representan el 86% del agua consumida en Egipto, y el 95 % en periodo de riada. El proyecto ha desencadenado tensiones con el ejecutivo de El Cairo. Egipto teme una reducción temporal de la disponibilidad de agua debido al llenado de la presa y una reducción permanente debido a la posible evaporación de los depósitos de agua. Esta pérdida para los países en sentido descendente podría verse distribuida temporalmente durante varios años si los países llegaran a un acuerdo. En marzo de 2015, Egipto, Sudán y Etiopía llegaron a un acuerdo, organizando el reparto del agua y la gestión de la operación de la presa etíope.
Con el fin de afrontar la gran escasez que el país puede vivir en el futuro y de satisfacer la demanda de la población, y proteger la estabilidad del país, el Gobierno de Egipto está invirtiendo gran parte de las ayudas para el desarrollo que recibe de países extranjeros y las instituciones financieras multilaterales en el desarrollo de proyectos en el sector de agua. Ahora mismo, sólo el 21% de aguas residuales de Egipto se someten a procesos de tratamiento de aguas. Por ello, el país prioriza este tipo de proyectos en todas las modalidades de tratamiento: depuración, abastecimiento y desalinización. La especial situación de Egipto hace que este país ofrezca un abanico de oportunidades para las empresas españolas, que disfrutan de una reputación excelente en el sector del agua gracias a las experiencias previas en el país, tal y como quedan detallas en el Estudio de Mercado de Aguas en Egipto, disponible ya en el portal ICEX.
Fuente:
Marzo, 2021