La encrucijada hídrica de Chile, el país latinoamericano más afectado por la escasez de agua
“Para que nuestros ríos lleguen sanos al mar”
El Recurso Hídrico y el fenómeno de la sequía
Según el World Resources Institute, Chile enfrenta un «estrés hídrico alto» debido a que la demanda de agua excede significativamente su disponibilidad.
Un estudio de la Fundación Chile destaca que un 44% de los problemas hídricos se deben a fallas en la gestión y gobernanza del agua.
Para fortalecer la gestión del agua, se está impulsando la colaboración público-privada, crucial para el desarrollo de los Organismos de Cuenca en Chile.
La crisis hídrica en Chile se ha intensificado, situando al país en una posición crítica a nivel latinoamericano. Según el World Resources Institute, Chile enfrenta un «estrés hídrico alto» debido a que la demanda de agua excede significativamente su disponibilidad. La situación se agrava por una gestión inadecuada y problemas en la gobernanza del agua. En este sentido, un estudio de la Fundación Chile destaca que un 44% de los problemas hídricos se deben a fallas en la gestión y gobernanza del agua, seguidos por el impacto de las actividades productivas con un 17% y la contaminación química en la agroindustria con un 14%.
Asimismo, según reportó en 2022 la Organización Meteorológica Mundial (OMM), actualmente, Chile atraviesa la crisis hídrica más larga de los últimos mil años; una «mega sequía» que ya dura trece años. Investigadores de la Universidad de Chile desarrollaron en julio del año pasado una plataforma interactiva que proporciona datos climáticos y de disponibilidad de agua durante las últimas seis décadas, con el fin de ayudar en la toma de decisiones en medio de esta prolongada sequía que afecta al centro y sur de Chile.
Los desafíos hídricos de Chile
Los desafíos que presenta la crisis hídrica en Chile son multifacéticos. El informe «Escasez Hídrica en Chile: Desafíos Pendientes» de las Naciones Unidas, resalta varios aspectos críticos, incluyendo los efectos del cambio climático, la inadecuada gestión de los recursos hídricos, la falta de infraestructura adecuada, y un marco legal que no prioriza el consumo humano de agua. En concreto, los desafíos hídricos de Chile son: (1) los efectos del cambio climático; (2) presiones de las actividades productivas y/o extractivas; (3) la gestión no integrada de los recursos hídricos; (4) la falta de infraestructura adecuada; (5) el marco legal que no explicita el derecho humano al agua y no prioriza el consumo humano; (6) la dispersión institucional en la toma de decisiones; y (7) disponibilidad y uso limitado de datos para la toma de decisiones.
La crisis hídrica en Chile se ha intensificado, situando al país en una posición crítica a nivel latinoamericano
Además, este informe enfatiza que las poblaciones más vulnerables, especialmente en zonas rurales y pobres, son las más afectadas, situación exacerbada por la pandemia de COVID-19.
La hoja de ruta
Ante esta crisis, el gobierno de Chile ha respondido con medidas implementadas dentro de los diferentes planes puestos en marcha, como el Plan Nacional de Rehabilitación de Pequeños Embalses, Tranques y Canales, el Plan de Embalses, iniciativas de agua potable rural e indicaciones a proyectos de ley sobre desalinización, regeneración y reutilización de aguas servidas, y extracción de áridos. Recientemente, también se ha anunciado la instalación de una planta desaladora en Coquimbo para 2029.
Sin embargo, a pesar de la existencia de veinte decretos de escasez vigentes en ocho regiones del país, lo que implica que casi 6 millones 300 mil personas en 128 comunas viven en sequía, según la ministra de Obras Públicas, Jessica López, expertos sugieren que se necesita una mejora significativa en la gestión del agua, enfatizado en la necesidad de una gestión integrada de los recursos hídricos que se enfoque en la coordinación entre distintos actores y sectores, así como en la regulación y control en el uso del agua. Además, se considera esencial la reutilización de aguas residuales y la recuperación de ecosistemas como parte de un enfoque sostenible.
Para fortalecer la gestión del agua, se está impulsando la colaboración público-privada
Asimismo, para fortalecer la gestión del agua, se está impulsando la colaboración público-privada, crucial para el desarrollo de los Organismos de Cuenca en Chile. Esta colaboración busca integrar recursos y conocimientos de ambos sectores para una gestión más efectiva y sostenible del agua, y trazar los caminos a seguir frente a la emergencia hídrica que vive el país.
Estas propuestas están alineadas con las recomendaciones de diversas organizaciones y expertos que resaltan la importancia de la gobernanza y la institucionalidad del agua para enfrentar esta crisis. En consecuencia, la situación demanda un enfoque multifacético que abarque desde la tecnología hasta la legislación y la conciencia pública.
Perspectivas futuras
Las perspectivas futuras incluyen el uso de tecnologías avanzadas para la desalación y tratamiento de aguas, una revisión profunda de la legislación y la gestión del agua, adaptación al cambio climático, educación y conciencia pública sobre el uso eficiente del agua, así como la cooperación internacional para intercambiar experiencias y conocimientos.
Esta visión integral es crucial para abordar la crisis hídrica de Chile de manera sostenible y eficiente. La participación activa de todos los sectores, incluyendo la colaboración público-privada, será clave para superar los desafíos actuales y asegurar un futuro hídrico más seguro para Chile.
Fuente:
Enero, 2024