BAIKAL, EL LAGO DE AGUA DULCE MÁS GRANDE DEL MUNDO
"Para que nuestros ríos lleguen sanos al mar"
lagos y Lagunas
En esta ocasión hablamos de uno de los lugares más curiosos del planeta, uno de esos al que todo viajero aventurero debe ir. Está en una región dura, en plena Siberia (Rusia).
Es el lago Baikal, el mayor lago de agua dulce del planeta. Los montes que lo rodean sirven como límite natural para dos provincias rusas: Oblast de la República (orilla suroriental) y de Irkutskaya de Buryatia (orilla noroeste). La parte más conocida y turística es la del sudeste, y la nororiental está prácticamente abandonada. Podrás llegar hasta él con el archiconocido ferrocarril Transiberiano.
Su superficie alcanza los 636 kilómetros de largo, con una anchura de entre 29 y 80 kilómetros, es decir, casi 31.500 kilómetros cuadrados. Son 2.100 kilómetros de orillas y un volumen de agua que supera los 23.600 kilómetros cúbicos. Albergaría por tanto el 20 por ciento del agua dulce del planeta. Si llegara un desastre mundial, se ha calculado que la raza humana podría vivir 40 años sin ningún problema de escasez consumiendo su agua. Además, también es uno de los más antiguos del planeta (unos 25 – 30 millones de años).
Su belleza es tan sobrecogedora que fue incluido en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco en el año 1996.
Aunque las condiciones climatológicas son extremas (45 grados bajo cero en invierno), es rico en flora y fauna. 1.600 géneros de animales y 800 vegetales catalogados hasta el momento. Los más conocidos son la foca Nerpa, el esturión del Baikal, el pez Golomjanka y el cangrejo Epishura.
También es conocido como el “Ojo azul de Siberia” o “la perla de Asia”, siendo uno de los lagos con mayor transparencia en sus aguas. Es tan pura y limpia que se pueden avistar objetos a una profundidad de 50 metros.
Podremos encontrar cosas fuera de lo usual como sus colinas de hielo (abultamientos de forma cónica cuyo interior está completamente helado de hasta 6 metros de altura). También podemos darnos de bruces con alguno de sus espejismos. Los lugareños suelen llamar a este fenómeno “la limpieza del crepúsculo”. El embudo del diablo es otro de los atractivos para los más valientes. En los momentos de calma total y de buen clima, el agua comienza a “hundirse”, formando una especia de embudo gigante. De acuerdo con las creencias de la población local, dicho embudo representa una entrada al infierno, a través de la cual las almas de los pecadores pueden llegar al averno. El triángulo del Baikal, es el hermano gemelo al de las Bermudas, ya que se producen turbulencias anormales en los vuelos sobre la zona y los aparatos dejan de funcionar o envían la información de manera incorrecta.
Los anillos de hielo gigantes, también son otro de los fenómenos inquietantes del lugar que ocurren cada cierto tiempo.
Por todo esto, te recomendamos esta experiencia única que por seguro será una historia que poder contar sin aburrir a tu audiencia.
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