El agua determinará el futuro de los humanos
"Para que nuestros ríos lleguen sanos al mar"
El Agua
Sin agua no podríamos vivir. Evitar la contaminación, gestionar los residuos correctamente, reducir su consumo, promover el reciclaje... se han convertido en cuestiones fundamentales que cambiarán el futuro de los ciudadanos.
Ciclo del agua
El ciclo natural del agua mantiene la presencia de ese recurso esencial para la vida mediante un circuito biogeoquímico durante el cual el agua se transporta por el planeta, conectando los océanos, los continentes y la atmósfera, y constituyendo la biosfera.
Infografía: David Martínez, NGM-E. Fuente: World Business Council For Sustainable Develompent United Nations Environment Programme
2 litros de agua potable al día
El consumo de agua para uso doméstico varía de forma considerable según el país. Los humanos necesitan un mínimo de dos litros de agua potable al día (menos
de un metro cúbico al año) para sobrevivir.
Infografía: David Martínez, NGM-E. Fuentes: Aquatat-FAO.
El agua determinará el futuro de los humanos
Ciertamente, la Tierra está cubierta de agua en su mayor parte. Pero muy poca es dulce y accesible al ser humano. Según datos de Naciones Unidas, 9 países poseen el 60% de ese recurso esencial, en proporciones muy diferentes: Brasil, Rusia, China, Canadá, Indonesia, Estados Unidos, India, Colombia y la República Democrática del Congo.
El reparto natural de los recursos hídricos en el mundo viene determinado por la geografía y el clima. Brasil, por ejemplo, debe esa riqueza a que la mitad de la cuenca hidrográfica del río Amazonas pertenece a su territorio, y Rusia, a la inmensa red de ríos que la cruzan, entre ellos el Volga, el río más largo de Europa, y a grandes masas interiores de agua dulce, legado de la glaciación, como es el caso del lago Baikal.
El riego consume un 70 % del agua dulce. Métodos más eficientes como el uso de microaspersores pueden reducir el gasto en un tercio. Siegfried Layda / Getty Image
Movimiento del agua por el planeta
El ciclo natural del agua mantiene la presencia de ese recurso esencial para la vida mediante un circuito biogeoquímico durante el cual el agua se transporta por el planeta, conectando los océanos, los continentes y la atmósfera, y constituyendo la biosfera. Para preservar el buen funcionamiento de esa capa tan fina que alberga toda la vida terrestre es necesario gestionar los recursos de forma sostenible y prevenir el deterioro de la naturaleza, promoviendo el reciclaje y minimizando la contaminación y los residuos.
Porque todo está conectado: el agua, tras evaporarse, se eleva en forma de vapor hacia la atmósfera, donde se enfría y se condensa para precipitarse en forma de lluvia o nieve en todos los rincones de la Tierra. La gestión que cada una de las sociedades humanas hacen de ese preciado líquido vital es distinta según el territorio, pero, a grandes rasgos, la mayor parte de ese recurso se destina a usos agrícolas, seguido del sector industrial y el abastecimiento de las personas. Sin duda la geografía de cada territorio marca las cartas con las que juega cada país, pero las políticas de sus gobiernos deberían saber gestionar de forma óptima su "baraja".
Las reservas hídricas determinarán de forma tajante el futuro de sus ciudadanos.
Fuente:
Diciembre, 2018