Depender de las montañas para el agua potable

"Para que nuestros ríos lleguen sanos al mar"

El Agua

Ríos como este en Suiza abastecen de agua potable a mucha gente de la zona. (Foto: D. Viviroli)

El consumo mundial de agua se ha multiplicado casi por cuatro en los últimos 100 años, y muchas regiones solo pueden cubrir su demanda de agua potable gracias a las contribuciones esenciales que hacen las regiones montañosas. Un estudio dirigido desde la Universidad de Zúrich en Suiza ha cuantificado por primera vez esta dependencia comparando el suministro y el consumo de agua en tierras bajas de diversas partes del mundo con el aporte de agua mediante la escorrentía de las montañas.

Basándose en un modelo global de alta resolución, el estudio proporciona información detallada sobre el grado de dependencia que la población de cada zona tiene hacia las montañas en cuestión de recursos hídricos.

Muchas investigaciones sobre el tema se han venido centrando principalmente en las cuencas fluviales alimentadas desde zonas de alta montaña en Asia, tal como comenta Daniel Viviroli de la Universidad de Zúrich y coautor del nuevo estudio. "Pero en muchas otras regiones, la agricultura de regadío depende en gran medida del agua de zonas montañosas. Algunas de estas regiones son Oriente Medio, África septentrional, y partes de América del Norte, América del Sur y Australia".

Esta dependencia ha aumentado de modo notable desde la década de 1960, a pesar de que el uso del agua se ha vuelto más eficiente.

En la década de 1960 solo el 7% de la población de las tierras bajas dependía mucho de las contribuciones hídricas de las zonas montañosas. En cambio, ya se prevé que esta cifra aumente hasta el 24% a mediados del siglo XXI. Esto corresponde a unos 1.500 millones de personas en las tierras bajas.

"Garantizar la función de las montañas como 'torres de agua' debería ser una de las principales preocupaciones de las poblaciones de las tierras bajas del mundo", advierte Viviroli. Por lo tanto, la gestión sostenible de las regiones montañosas es esencial. Además, la acción climática es de suma importancia: Debido al aumento de las temperaturas, los picos de escorrentía de agua de deshielo de las regiones montañosas cubiertas de nieve a veces ya se producen varias semanas antes de lo que en épocas pasadas era habitual y, por lo tanto, no son tan útiles para la agricultura de verano. Será necesario hacer ajustes en la gestión del agua y posiblemente también crear nuevas infraestructuras como presas y trasvases de agua.

Fuente:

Julio,2020